El Día Internacional del Taco se celebra el 31 de marzo en México como una forma de honrar al que es, sin duda, el plato más conocido de la cocina mexicana en todo el mundo. Se trata de un bocadillo sencillo que puede hacerse con casi cualquier cosa y comerse con las manos. Sólo se necesita una tortilla para envolver y contener la comida, un guiso principal en su interior y una salsa picante para rematar.
Los tacos pueden elaborarse con una gran variedad de ingredientes, como carne, verduras, pollo, pescado, etcétera. Existen tacos que se degustan por la mañana, en el mediodía y por la noche. El taco al pastor no se come nunca por la mañana, sino a partir de las 7 de la tarde. Los domingos, normalmente se come el taco de carnitas para desayunar.
Miles de restaurantes, taquerías, bares y otros establecimientos sirven los tacos de forma más o menos tradicional. Y, por supuesto, hacerlos en casa no es difícil.

Tortilla
Las tortillas son el elemento principal de un taco y en muchos lugares prefieren hacerlas a mano. La salsa constituye el 30% del plato, mientras que el guisado constituye el 70% restante.
Para hacer las tortillas se puede utilizar harina de maíz nixtamalizado. Es sencillo hacerlas en casa; basta con añadir poco a poco agua caliente a la harina hasta que la masa se despegue de las manos. No hay ni un solo grano de sal a la vista. Lo más difícil es que se tiene que utilizar una prensa para que todas las tortillas sean idénticas. Sin embargo, lo más práctico sería comprar tortillas ya hechas, que se consiguen en todas partes, de trigo, de maíz y de harinas mixtas para ahorrarse el trabajo.

El guisado
Los tacos pueden elaborarse con prácticamente cualquier componente, como carne de cerdo, marisco, pollo, pescado y, por supuesto, verduras. Los tacos hechos con huitlacoche (hongo del maíz), flor de calabaza o cabuches (flor de cactus) son bastante populares en México.

La salsa
Los tacos sin salsa no son tacos; son algo totalmente distinto. Los secretos de muchas taquerías se transmiten de generación en generación; muchas son recetas familiares heredadas. De igual manera, tiene mucho que ver la geografía: las salsas se hacen más picantes en el centro de México, mientras que en el norte del país las salsas tienen mucho sabor pero son menos picantes.
